/// GERARDO BUSTOS ///
Las administraciones públicas emprendieron hace unos años el camino hacia la administración electrónica. Ese camino se ha acelerado con la entrada en vigor de las leyes 39/2015 y 40/2015, que consideran que el funcionamiento habitual y exclusivo de las administraciones públicas españolas es el electrónico. No se trata ni de una moda ni de un capricho legislativo. Sencillamente, vivimos en un mundo conectado y las leyes son la respuesta del sector público a ese mundo.
Últimamente, siempre que inauguro un curso sobre documento, expediente y archivo electrónico, o me invitan a una charla sobre administración electrónica, antes de entrar en materia dedico unos minutos a abordar el mundo conectado en el que vivimos. ¿Y por qué he empezado a hacerlo así desde hace un año? Pues porque me he dado cuenta de que un porcentaje significativo de los empleados públicos (de todas las AA PP), a medida que se acercaba la entrada en vigor de las leyes conocidas como “siamesas» pasaban, no sin esfuerzo ni reticencias, a aceptar, acatar y resignarse a la necesidad de adaptarse a la administración sin papeles.
El vuelco jurídico de las leyes “siamesas”
Naturalmente, me refiero a las leyes 39/2015, de 1 de octubre, del Procedimiento Administrativo Común de las Administraciones Públicas, y 40/2015, de 1 de octubre, de Régimen Jurídico del Sector Público. Ambas leyes suponen un vuelco en el marco jurídico del funcionamiento de las administraciones públicas, tanto hacia dentro de ellas como en sus relaciones con los ciudadanos y la sociedad.
He hablado de “aceptar”, “acatar”, “resignarse”, pero no de comprender, entender en el marco en que se producen y asumir con un mínimo de convicción. Estamos hablando de acatar disciplinadamente, asumir que no queda más remedio. El problema es que la disciplina no vence la resistencia al cambio; sólo la torea. Es necesario entender para asumir y comprender para entusiasmarse. Y no nos engañemos, la administración electrónica es un cambio tan brutal, que necesita entusiastas.
8.000 millones de móviles
En pocos años el móvil se ha convertido en un aparato inseparable que acompaña a cualquier ser humano. Y el móvil no es un teléfono, sino sobre todo un potente aparato que nos enlaza con el resto de la humanidad a todos los niveles, desde cualquier parte y a cualquier hora. Pues bien, si queremos conocer el mundo en el que vivimos, lo primero que tenemos que saber es que en 2016 había más de 8.000 millones de teléfonos móviles en el mundo, cuando el número de habitantes no llega a 7.400 millones.
Tengamos en cuenta, además, que el móvil no es un aparato exclusivo del mundo desarrollado. Naturalmente, está más implantado en los países industriales, pero también es un aparato extendido en los países menos desarrollados. Entre otras cosas, porque es más fácil y barato instalar la comunicación mediante la telefonía móvil que con las infraestructuras de la telefonía fija. Tan es así, que por ejemplo, Nigeria es el país del mundo donde más se accede a internet desde el móvil (82 %).
Esta situación da lugar a un mundo donde Internet tiene 3,17 mil millones de usuarios y hay 2,3 mil millones de usuarios activos en redes sociales. Y cada día, 1 millón de usuarios activos de redes sociales en móviles nuevos.
Facebook tiene más usuarios que China habitantes
La estrella de las redes sociales es Facebook. Para darnos cuenta de la dimensión de esa conexión, pensemos en los 1.860 millones de usuarios de Facebook, cifra que se incrementa a razón de medio millón de usuarios nuevos cada día.
Añádase a eso los 1.325 millones de usuarios de Youtube. Digamos que Whatsapp y Messenger tienen cada una 1.000 millones de usuarios. Instagram cuenta con 600 millones de usuarios. Linkedin tiene 467 millones de usuarios. Twitter, 317 millones de usuarios, que envían 500 millones de tuits al día, 6.000 cada segundo.
Esta situación nos hace pensar en potentes focos de poder diferentes al territorial. Resulta que Facebook tienen más usuarios que habitantes el país más poblado de la tierra, que es China; o cinco veces más usuarios que el número de habitantes del país más poderoso de la Tierra, que es USA. Youtube tiene aproximadamente tantos usuarios como China habitantes.
Actividad febril de las redes sociales
Esta situación genera una actividad que impresiona. Facebook Messenger y Whatsapp mueven 60.000 millones de mensajes diarios. En WordPress se publican 56 millones de blog posts cada mes. Nuestro inseparable Google procesa 100 mil millones de búsquedas cada mes, es decir, 40.000 búsquedas por segundo. Cada minuto se suben 300 horas de video a YouTube. Cada mes se ven 3,25 mil millones horas de video.
En el centro de esta permanente conexión, el móvil. Poco a poco va ganando terreno como la principal herramienta del mundo hiperconectado. Más de la mitad de las búsquedas de Google se realiza con dispositivos móviles. También más de la mitad de las visitas a YouTube provienen de dispositivos móviles.
Hasta aquí hemos estado hablando de las conexiones entre personas, pero no podemos olvidar las conexiones entre cosas, el internet de las cosas. De acuerdo con las previsiones de la consultora americana Gartner, en 2020 el número de objetivos conectados se disparará hasta los 20.415 millones.
Digital sí o sí
¿Apabullado por las cifras? De eso se trataba. Podríamos seguir mencionando cifras de este tipo hasta el infinito. Para provocar la reflexión inevitable: este impresionante grado de conexión creciente, ¿hacia dónde nos lleva? Por otro lado, ¿cuál es la administración pública adecuada en un mundo conectado?
Es decir, las leyes administrativas que nos dibujan unas administraciones públicas funcionando exclusivamente en electrónico son la respuesta administrativa a una sociedad conectada, en la que se empieza a implantar el funcionamiento digital en todos los órdenes de la vida. Pensemos que en algunos sectores, como la banca, llevamos cerca de dos décadas funcionando en electrónico casi sin darnos cuenta del cambio.
¿De verdad piensas, querido lector, que a la vista de estos datos, podríamos seguir caminando en una nave administrativa envuelta en papel? La administración sin papeles podría haberse planteado con otros plazos, con unos recursos adecuados que aceleraran el proceso con una estrategia más sólida y pausada. Pero la administración sin papeles es en todo caso el horizonte inevitable.
La fuentes de las cifras empleadas:
http://www.amic.media/media/files/file_352_1050.pdf
https://www.multiplicalia.com/redes-sociales-mas-usadas-2017/
https://marketing4ecommerce.net/cuales-redes-sociales-mas-usuarios-mundo-2017/
https://www.brandwatch.com/es/2016/08/96-estadisticas-redes-sociales-2016/